Título: | Adam Smith: Liberalism and practical reason : Adam Smith: liberalismo y razón práctica |
Autores: | Carrasco, María Alejandra |
Tipo de documento: | texto impreso |
Editorial: | Universidad Pontificia Comillas, 2016-10-18 |
Dimensiones: | application/pdf |
Nota general: |
Pensamiento. Revista de Investigación e Información Filosófica; Vol. 62 No. 232 (2006): Enero-Abril; 43-69 Pensamiento. Revista de Investigación e Información Filosófica; Vol. 62 Núm. 232 (2006): Enero-Abril; 43-69 2386-5822 0031-4749 |
Idiomas: | Español |
Palabras clave: | Parte cuarta. La religión y la condición natural del hombre |
Resumen: |
My aim in this paper is to show that the concept of rationality that underlies Adam Smith’s Liberalism explains its technical and moral superiority over other kinds of social arrangements, for it is exactly the kind of rationality we human beings use in this sphere of life: practical reason. In particular, technical superiority or the specific justification of liberal institutions may be accounted by their open, dialogic and cooperative structure, which corrects errors and incorporates past experiences. Hence they give form, at the end of the day, to the kind of institution that better uses human knowledge in each particular field. On the other hand, the moral justification of Adam Smith’s Liberalism is based on the until recently somewhat neglected emphasis of this theory on equality or even equal human dignity, which may be inferred from its treatment of justice and the impartial spectator. En este artículo postularé que el orden liberal que propone Adam Smith en su obra es tanto técnica como moralmente superior a otros tipos de ordenamientos sociales, por cuanto la racionalidad que le subyace es la más adecuada para el ámbito de la vida humana que regula: el de la praxis. La superioridad y justificación técnica de las instituciones liberales se explica por su estructura abierta, dialógica y cooperativa, capaz de aprovechar los errores y aprender de la experiencia para acercarse, poco a poco, a un modelo que aumente la productividad global de cada institución en su ámbito específico. La justificación moral de este ordenamiento, por su parte, se apoya en el hasta ahora poco destacado respeto a la igualdad, o incluso igual dignidad de los seres humanos, que se infiere del tratamiento que Adam Smith da a la justicia y a el espectador imparcial en su obra. |
En línea: | https://revistas.comillas.edu/index.php/pensamiento/article/view/4645 |
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